El imponente mástil que atraviesa la Torre Tavira desde la segunda sala de exposiciones (dónde se encuentra anclado) y que se levanta a más de 10 metros de altura en el mirador, ha sido sometido a trabajos de restauración en los pasados días.
Este espectacular elemento de la Torre se había visto dañado en determinados puntos del armazón debido al paso del tiempo y su exposición, de forma permanente, a fenómenos climatológicos adversos tales como las lluvias, los vientos y la humedad. Los trabajos han consistido en el refuerzo de la estructura en los puntos en que ésta se había visto más dañada, mediante su recubrimiento con protectores metálicos de gran resistencia.
Con ésta actuación no sólo se pone freno al deterioro del mástil, sino que también se garantiza la seguridad y perdurabilidad de toda la estructura que lo conforma.
En la galería fotográfica adjunta se pueden contemplar los trabajos de restauración, así como el estado en que el mástil se encontraba y el que presenta tras ser sometido a los trabajos de mejora ya mencionados.