Como viene siendo habitual en los últimos años, Torre Tavira inicia el año llevando a cabo una serie de trabajos de mantenimiento, motivo por el cuál la Torre ha permanecido cerrada durante unos días en el comienzo de mes de enero.
En esta ocasión las actuaciones llevadas a cabo han sido de menor calado que ocasiones anteriores como resultado de la reforma más profunda que tuvo lugar el año pasado. No obstante se ha actuado en diferentes estancias de la Torre para reparar pequeños desperfectos provocados por el continuo trasiego de personas por el edificio, así como pequeñas actuaciones rutinarias para asegurar el correcto estado de mantenimiento de diversas áreas estructurales de la Torre.
Entre los trabajos realizados se encuentran: el lijado y pintado con un tratamiento especial muy resistente a la humedad de todas las barandillas de la escalera de la Torre, pintado y resanado del mostrador de recepción y pintado y resanado de las paredes de recepción, escaleras, y ambas salas de exposiciones.
Uno de los trabajos más delicados ha tenido lugar en la terraza, donde ha sido aplicado un tratamiento especial con poliurea para evitar las filtraciones de agua desde la terraza hacias las estancias situadas justo bajo el mirador. La Poliurea es un material impermeabilizante que se utiliza a menudo en entornos industriales y comerciales para proteger las superficies de los daños causados por el agua. Se aplica como revestimiento líquido, que cura rápidamente formando una barrera impermeable y duradera.
El instrumento óptico, aunque es sometido a un mantenimiento específico y continuado durante todo el año, también ha sido tratado. Concretamente se han llevado a cabo trabajos de resanado del tubo metálico de la Cámara Oscura en su cara exterior y de revestimiento con materiales específicos en su cara interior para garantizar la mayor calidad de imagen de las proyecciones en las sesiones de Cámara Oscura.
Por último todo el suelo de la Torre ha sido sometido un tratamiento de abrillantado que le otorga un espectacular aspecto, ¡tal y como lucía en el siglo XVIII!
Como cada temporada iniciamos, tras estos trabajos, un nuevo año asegurando el correcto mantenimiento del edificio y la seguridad de sus habitantes y visitantes, lo cuál nos ayuda a garantizar un servicio de calidad y una experiencia inolvidable a todas aquellas personas que nos visitan cada día.