En este mes de marzo, mes de la mujer, nos gustaría compartir la historia de algunas de esas muchas mujeres que desde tiempos inmemoriales ya luchaban por sus derechos convirtiéndolas en auténticos ejemplos a seguir. Mujeres que con su lucha, su valentía y su buen hacer abrieron el camino a las generaciones de mujeres que seguirían sus pasos.
Y lo vamos a hacer desde Cádiz, más concretamente desde la Real Fábrica de Tabaco. Nos trasladamos al siglo XVIII, época dorada de la ciudad, una ciudad abierta, cosmopolita y liberal como pocas en esa época pero en un contexto social muy diferente y lejano al actual. En el año 1731, los cigarreros de Sevilla mandaron una queja al Rey, un memorial en el que trasladaban al monarca su malestar y disconformidad con el salario que percibían por sus labores. En dicho escrito esgrimían que su sueldo era bastante menor que el recibido por las “elaborantes” (mujeres cigarreras) de Cádiz, siendo ellos hombres y, por tanto, con muchas mas obligaciones que las mujeres, en lo que ellos entendían como un agravio intolerable. La respuesta recibida desde Palacio fue bastante esclarecedora; en ella se les aclaró que el salario que recibían era proporcional al número de mazos de cigarros elaborados, y que la cuantía retribuida por cada mazo era exactamente igual que la recibida por las «elaborantes», pero que estas segundas «son más cuidadosas y trabajan con más pulcritud, generando menos desperdicios, por lo que su labor cunde más, obteniendo así más dinero por el mismo tiempo de trabajo».
El trabajo de las mujeres cigarreras fue muy apreciado y solicitado y gracias a su buen hacer, su profesionalidad y su lucha contra los prejuicios de la época consiguieron que las ampliaciones de personal fuesen mayoritariamente de mujeres. Cuando más tarde aparece la elaboración del cigarrillo, las cigarreras gaditanas habían adquirido tal nivel de precisión y perfección en su trabajo que hizo que tan sólo ellas fueran capaces de preparar esta modalidad. Una técnica que trasmitirían de generación en generación manteniendo siempre unos altísimos estándares de calidad.
Este relato viene a recordarnos lo mucho que se ha peleado a lo largo de la historia para visualizar la desigualdad de género y para reivindicar la lucha por la igualdad efectiva de derechos para las mujeres y que a pesar de lo mucho que se ha avanzado aún queda camino por recorrer. ¡Un camino que recorreremos juntas! 💪🏼
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*Fuentes consultadas para la elaboración de este post: «Historia de las cigarreras de Cádiz» (Blog Cádiz y sus historias).