Cádiz en Danza inicia su andadura en 2001 como una extensión del ciclo ‘Huellas, Danza en Paisajes Urbanos’, surgido en el Mes de Danza de Sevilla. En 2006, debido al crecimiento de la muestra en la capital gaditana, el Ayuntamiento de Cádiz decide poner en marcha como proyecto autónomo, el Festival Internacional de Danza Contemporánea Cádiz en Danza.
El Festival se desarrolla por toda la ciudad, utilizando tanto espacios escénicos convencionales como la Sala Central Lechera o el Gran Teatro Falla como espacios públicos e insólitos, algunos tan emblemáticos como la Plaza de la Catedral u otros nuevos redescubiertos por la ciudad, como el Oratorio de San Felipe Neri, el Espacio de Creación Contemporánea (ECCO) o la plataforma Entrecatedrales. Es en este último aspecto donde nace la colaboración entre la Torre Tavira y Cádiz en Danza, incorporándose ésta como uno de los escenarios del festival acogiendo el espectáculo: «Cádiz, un ensayo de arqueodanza».